viernes, 10 de abril de 2009

Elizabeth Cotten

Esta hermosa mujer combate los tópicos más abominables del arte. Esta hermosa mujer compuso una música frágil y llena de emoción ajena al bullicio. Nació en Carolina del Norte a principios de 1893, su padre era minero y su madre sirvienta y lavandera. Con 8 años aprendió a tocar el banyo, más tarde la guitarra. A los 11 compuso esta canción:



A los 12 años entró a trabajar como empleada doméstica ayudando a su madre y tres años mas tarde se casó y dió a luz su primer hijo. Se unió a la Iglesia y dejó casi por completo la guitarra tocando sólo en raras ocasiones durante los siguientes 25 años. A principios de 1940 entra a trabajar como doméstica de un tal Charles Seeger, padre de tres hijos: Pete, Peggy y Mike. Imaginad la carita que se les quedaría a este clan musical cuando un buen día Elizabeth saca su guitarra y toca su "Freight train", tema que, 55 años después de ser compuesto, entra en la las listas de éxitos del Reino Unido.

¿Y por qué ésta otra es la canción de Abel?:


Porque hay que empeñarlo todo, sí señor, hay que empeñarlo todo antes de ir al cielo.

Alan Lomax


En 1935, este señor, que apenas tenía 20 años de edad, se convirtió en el director de los Archivos de la Canción Folk Americana de la Biblioteca del Congreso de Washington. Decidió entonces viajar con su padre por los estados del Sur, realizando históricas grabaciones en un continuo rastreo que les llevó, entre otros lugares, a la prisión de Angola, en Louisiana, en busca del estado más puro de las canciones antiguas. Esta cárcel tenía fama de ser una de las más duras de su clase, tanto por las condiciones de vida como por la peligrosidad de sus internos. Allí descubrieron a Huddie Ledbetter, más conocido como Leadbelly, a quien ayudaron a salir de prisión y a convertirse en uno de los bluesmen más míticos de la historia.

En 1938, Lomax grabó durante horas las canciones y las declaraciones de Jelly Roll Morton, uno de los fundadores del jazz, y en 1940 formó parte de un equipo que bajó al Sur en busca de Robert Johnson (ignorando que ya había muerto), y a cambio se encontró con un veinteañero llamado Muddy Waters, que poco después de grabar con él se mudaría a Chicago y revolucionaría el mundo del blues.

No more, my lawd' es una de esas primeras grabaciones en la cárcel, lamento a golpe de martillo, seco, cansado, eterno.

Romance del prisionero

Es que aquí está dicho todo.

Versión de Amancio Prada

The Rolling Stones


Ésta se la debemos al tío Ignacio, que nos descubrió tantos, tantos discos, entre ellos el álbum reggae de los Stones. ¡Ah! Y es la canción de Enric, porque Enric, a pesar de todo, es la música negra. Reggae y, como se verá al final, rap.




54 46

Decía el mensaje: "Lo siento muxo. Mi xico me invita a ver a los totsandthemayls y no puedo ir a tu estreno. Espero poder verlo pronto. Muxa mierda."

Y decían las matrículas: "54 46, that's my number".


Another man done gone

Qué bien suena eso de que "otro hombre se ha fugado". Se ha fugado, se ha ido, se ha marchado, se fue. Es el hipnotismo del blues tradicional, la ascesis del canto espiritual, encerrado en las mágicas sílabas finales "done gone". Es el alma la que se fuga, constantemente, con voces así:

The Beatles




Probó Carlos a cantar con su guitarra multicolor: "No es ella una chica que se pierda mucho... Tra-la-la-la-la-la, oh yeah", pero no, no...

En México, una videoinstalación, una mujer encerrada en una habitación blanca que no paraba de cantar "she's not a girl who misses much, she's not a girl who misses much" como si fuera Alvin y sus ardillas.

Ridículo e incomprensible. Y sin embargo, en el recuerdo.

Menos mal que otros hacen mejores cosas con las referencias:


Charles Manson



Se enfadó. Porque a más de un productor no le decían nada tonadas como ésta, en la que el autor se pregunta por qué la gente dice que él no es bueno:



Hicimos una versión de "Garbage dump" que decía: "Oh, vertedero hogar, oh, vertedero hogar / cómo te quiero, vertedero hogar". Pero no nos convencía. Así que seguimos cantando. Con Axl, Charlie y el Che:




The Velvet Underground

Who loves the sun?, se pregunta Eduardo en la mañana del deshielo.

Who loves the sun
Who cares that it makes plants grow
Who cares what it does
Since you broke my heart

Pa pa pa pa
Who loves the sun

El preso nº9

O una crónica de Abel.

(Cortesía de Angélica Liddell)


Nina Simone


“Jazz es un término blanco para definir la música negra: Lo que yo hago es música clásica negra. Para la mayoría de los blancos, jazz significa negro y también significa sucio, y eso no es lo que yo interpreto. Yo hago música clásica negra. Por eso a mí, como a Duke Ellington, no me gusta el término jazz. Y eso me hace pensar que si me compararon inmediatamente con Billie Holiday fue sólo por el color de la piel. Pero nunca me compararon con María Callas, y eso que siempre fui tan diva como ella. Como yo, la Callas era tempestuosa, absolutamente única, y estudió su música más que cualquier otra de su generación. Podía crear las reglas y romperlas cada vez que quisiera, y el mundo la escuchaba porque era la Callas.”

Grande, grande, Nina.

Grande el hombre de los platillos.

Will & Zach

Y de cierre... la inspiración definitiva.

Cómo fosforecían nuestros bailes en la ciega, en el verano del 2008. Cómo fosforecían nuestros bailes en la ciega...